Un mueble de baño para cada tipo de persona

Grande, pequeño, con mucho almacenaje, clásico, minimalista… Si cada persona es diferente, cada baño también debe serlo para adaptarse no solo a los gustos, también a las necesidades particulares de cada uno. Y si hay un elemento esencial en esta estancia, ese es el mueble. ¿Pero cómo acertar?

1. Perfectos para guardar muchas cosas

Evidentemente, el mueble de baño tiene que ir en consonancia con las dimensiones de la estancia. Pero aquellos que tengan que guardar obligatoriamente en él tanto los productos de aseo e higiene como toallas, secadores, etc deben buscar la máxima capacidad de almacenamiento, y esa la dan los muebles compactos que llegan hasta el suelo.

Otra forma de aprovechar al máximo su capacidad es optar por muebles con cajones. Con puertas y gaveteros a veces se desperdicia un espacio precioso. 

2. Para tener todo perfectamente organizado

A veces, más que espacio, lo que se necesita es tener todo en su lugar para que resulte fácil localizarlo cuando más se necesita. En ese caso, muebles con cajones o puertas de diferente tamaño pueden resultar prácticos, pero lo que realmente es funcional es que estén bien compartimentados y tengan organizadores. De esa manera no se perderá un segundo buscando ese peine o esa crema que se necesita.

3. Cuando hay que compartir

Si hay un solo baño y no queda más remedio que compartirlo, lo ideal es poner un mueble con lavabo doble, de esa manera no habrá problemas. Evidentemente, hace falta algo más de espacio, pero hay modelos de medidas tan ajustadas que se pueden adaptar a baños no demasiado grandes.

Hettich para cajones de muebles de baño

4. Un mueble de baño para cada estilo

En este sentido, la variedad de opciones es inmensa. Para aquellos que prefieren líneas clásicas, los muebles de madera barnizada o con pintura a la tiza son perfectos. Quienes sean busquen aires minimalistas, los muebles suspendidos, de líneas rectas y lacados en blanco son un clásico. Y cuando se prefiere algo rompedor, hay muebles de diseño de líneas curvas o formas asimétricas que son tan decorativos como elegantes. 

Pero hay muchas más posibilidades: muebles de estilo vintage, mueble rústico o urbano; en diferentes colores y acabados; para lavabos encastrados, de encimera o superpuestos, etc. Solo es cuestión de buscar un poco para encontrar el mueble de baño ideal. 

5. Para los más pequeños

También hay muebles de baño especialmente pensados para cuartos de baño infantiles. Muebles llenos de alegres colores, en materiales muy resistentes y de fácil limpieza y, de manera muy especial, con cierres amortiguados para evitar que por accidente los niños se lastimen los dedos.

6. Muebles accesibles

En el caso de personas con problemas de movilidad y tengan que desplazarse en silla de ruedas, lo más práctico es optar por lavabos suspendidos. Pero eso no significa que haya que renunciar al mueble, siempre se puede colocar uno auxiliar en un lateral o incluso un lavabo-encimera con un pequeño cajón debajo para guardar lo más imprescindible.

Elegir un mueble para el baño es algo muy personal, pero siempre hay que saber combinar estética, funcionalidad y necesidades de almacenaje. Y sí, el mueble ideal existe, simplemente hay que dedicar algo de tiempo a buscarlo.