Tips para desinfectar bien tu baño

Aunque podamos llegar a confundir los términos, desinfectar no es lo mismo que limpiar. Y este es un aspecto que debemos tener especialmente en cuenta en estancias más expuestas a la proliferación de gérmenes o a condiciones de humedad que facilitan su supervivencia en ellas. Ese es el caso de los cuartos de baño.
No hay que olvidar tampoco que en muchas ocasiones es una estancia que comparte la familia, por lo que debemos dedicarle todo el tiempo necesario para evitar riesgos. ¿Cómo desinfectar el baño? Vamos a verlo.


Lo primero, protección
Siempre es conveniente que utilices guantes para desinfectar el baño, no solo para protegerte frente a los microorganismos, también para evitar la irritación que puede provocar el contacto con los productos utilizados.
Además, siempre que sea posible, y sobre todo si hay enfermos en casa, utiliza guantes desechables y papel que puedas tirar después de la desinfección.


Los productos
En el mercado vas a encontrar muchos productos con propiedades desinfectantes que puedes utilizar para todas las superficies del baño. Pero si tienes lejía en casa, puedes usarla sin problemas.
Solo tienes que preparar una sencilla mezcla: echa 20 ml en una botella de litro, rellena con agua y mezcla bien. Recuerda, eso sí, que debes hacer la disolución cuando vayas a usarla. Si no necesitas tanta cantidad, simplemente mezcla una parte de lejía y cuatro de agua.


La limpieza
Para asegurar una buena desinfección, es importante rociar bien todas las superficies y dejar actuar el producto antes de aclarar, si fuera necesario. Si usas bayeta para extenderlo, mójala en la disolución, pásala por una superficie pequeña, enjuágala con agua del grifo y repite el proceso después de cada pasada.
Para aclarar, utiliza una bayeta diferente y si quieres secar la superficie, mejor papel absorbente desechable.


No dejes nada
Virus y bacterias pueden depositarse y permanecer en cualquier superficie durante un tiempo, incluso en algunos casos pueden proliferar si el ambiente es propicio. Por eso, no debes pasar por alto ninguna superficie. Interruptores, enchufes, pomos, tiradores, radiadores, accesorios… Debes pasar la bayeta por todos ellos con el mismo cuidado con que lo haces en los sanitarios.
Y hablando de sanitarios, para limpiar el inodoro, además de bayeta, usa una escobilla que te permita llegar a todos los recovecos del interior. Y no olvides pasar muy bien asiento, tapa y pulsador. En el caso del lavabo, presta especial atención al grifo y ayúdate de un cepillo para dejarlo impoluto.


¿Qué más debes tener en cuenta?
Para una correcta desinfección, no puedes olvidar otros elementos, como el espejo, los azulejos e incluso la mampara de la ducha, las estanterías o los muebles de baño. Y, por supuesto, es importante cambiar las toallas.
Tampoco debes olvidar limpiar con las ventanas o puertas abiertas, una buena ventilación es imprescindible. Los productos de limpieza habituales o la lejía son seguros, pero los vapores pueden ser algo irritantes para algunas personas.
Es cierto que desinfectar el baño puede llevar tiempo y convertirse en una tarea algo tediosa, sim embargo, con una buena higiene estarás cuidando de tu salud y la de los tuyos, no lo olvides.

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